Durante actividades oficiales del XVIII Ayuntamiento de La Paz, Baja California Sur, la séptima regidora María del Carmen Aguilar Mendoza, militante del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), causó indignación al portar una camiseta con la caricatura de Joaquín “El Chapo” Guzmán. En las imágenes, que circularon desde el 11 de julio en sus redes sociales, se le ve luciendo la prenda durante eventos como campañas de reforestación, limpieza de parques y reuniones vecinales.
La camiseta muestra una versión caricaturizada del narcotraficante con gorra y chamarra beige, similar a su vestimenta en su primera captura en 1993, adaptada al estilo del videojuego Mario Bros con la leyenda “Super Chapo Bros”. La difusión de estas imágenes ha provocado fuertes críticas ciudadanas que acusan a la funcionaria de promover una figura criminal desde un cargo público.
Expertos en derecho penal advierten que este acto podría constituir apología del delito, conforme al artículo 208 del Código Penal Federal y a la legislación local, que contemplan sanciones que van desde trabajo comunitario hasta penas de prisión. El hecho resulta aún más polémico por ocurrir en un contexto de creciente violencia en Baja California Sur, donde se han contabilizado al menos 40 narcomantas en los últimos meses.
Pese a la gravedad del hecho, ni el Ayuntamiento de La Paz ni su alcaldesa Milena Quiroga Romero han emitido una postura oficial. Tampoco Morena, partido al que pertenece la regidora, ha realizado pronunciamiento alguno. La omisión institucional y partidista refuerza la percepción de que en algunos sectores políticos, la figura de criminales como “El Chapo” no solo no incomoda, sino que incluso genera simpatía.