Adán Augusto López, actual coordinador de Morena en el Senado y uno de los políticos más cercanos al expresidente Andrés Manuel López Obrador, se encuentra bajo el escrutinio público por un escándalo que amenaza con sacudir los cimientos de la Cuarta Transformación. Su exsecretario de Seguridad en Tabasco, Hernán Bermúdez Requena, está señalado como presunto líder del grupo criminal “La Barredora”, una célula asociada al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG). La posibilidad de que existiera conocimiento o protección desde el entorno de Adán Augusto ha abierto una cloaca que podría costarle caro a Morena.
La Fiscalía de Tabasco giró una orden de aprehensión contra Bermúdez en enero de 2025, y la Interpol activó una ficha roja internacional. Se presume que el exfuncionario huyó por vía aérea desde Mérida hacia Panamá, con escalas en España y Brasil. Autoridades estatales y militares habían advertido desde finales de 2024 sobre su presunta relación con el crimen organizado, sin que hubiera una respuesta contundente en su momento. Ahora, la gran interrogante es si Adán Augusto realmente ignoraba los nexos de uno de sus colaboradores más cercanos.
El senador ha negado haber tenido conocimiento de los vínculos de Bermúdez y defendió que lo veía todos los días en las mesas de seguridad, sin ningún indicio irregular. Desde la dirigencia de Morena, Arturo Ávila descartó abrir una comisión investigadora contra López Hernández, argumentando que el caso ya está judicializado. Sin embargo, la decisión contrasta con la postura del partido en otros escándalos, como el “Cártel Inmobiliario”, donde sí se han promovido investigaciones parlamentarias. La aparente doble vara ha desatado críticas incluso dentro del propio movimiento.
Pese a la creciente presión mediática y política, Adán Augusto se niega a dejar su cargo. Afirma que su nombramiento en el Senado es por toda la legislatura y que seguirá trabajando por los principios de la 4T. No obstante, si las investigaciones confirman vínculos directos o indirectos con el crimen organizado, el “hermano” político de AMLO podría convertirse en el mayor lastre para Morena rumbo al próximo ciclo electoral.