Zacatecas, Zac.– La novillera española Miriam Cabas debutó con picadores en México en una tarde marcada por la lluvia y la entrega, logrando cortar una oreja a cada uno de sus ejemplares y salir en hombros ante la ovación del público.
La apuesta de la Fundación Los Ángeles Taurinos A.C. por impulsar la carrera de la joven gaditana se vio recompensada, al hilvanar dos faenas de distinto corte que permitieron mostrar su tauromaquia. A ambos novillos los despachó al segundo viaje con la espada, dejando constancia de su preparación y temple.
La empresaria Tomasina, ausente por motivos de salud familiar en Estados Unidos, puede sentirse satisfecha por el resultado, que confirma el acierto de apoyar a una torera con cualidades para construir una carrera sólida. Cabe recordar que Cabas también salió en hombros en su debut con caballos en La Línea de la Concepción, España, el pasado 19 de julio.
En Zacatecas, donde llegó días antes para labores de difusión, fue recibida con entusiasmo por la afición. Ante el tercer novillo, el más serio de la primera parte, se mostró firme y preparada, fruto de su entrenamiento en ganaderías mexicanas. Su capacidad para domeñar la embestida exigente del burel le permitió torear con temple y largueza, provocando rotundos olés, especialmente al natural. Tras un pinchazo, logró una estocada entera que le otorgó una oreja.
Durante la lidia del sexto novillo, ya bajo intensa lluvia, Cabas decidió continuar. El ruedo fue acondicionado con serrín y el astado ofreció mejores embestidas. La novillera se expresó con verónicas cadenciosas y una faena de muleta que fue a más, logrando pases con despaciosidad y hondura. Nuevamente, despachó al segundo intento con estocada entera y recibió otra oreja, asegurando la Puerta Grande.
Cabas compartió cartel con César Ruíz, quien cortó una oreja al novillo que abrió plaza, destacando por su entrega y alegría. Recibió al astado con lances de rodillas, colocó banderillas certeras y logró muletazos de calidad, culminando con estocada al primer viaje. El cuarto novillo ofreció menos opciones y la lluvia afectó su faena.
El novillero local Juan Flores vivió una tarde complicada. Pese al respaldo del público, solo dejó detalles con capote y muleta. Su mal desempeño con la espada le hizo escuchar tres avisos en cada uno de sus turnos. Se le reconoce el esfuerzo al lidiar el quinto novillo bajo la tormenta.
