Ciudad de México.- En homenaje a un siglo de labor ininterrumpida en la construcción, conservación y rehabilitación de la infraestructura carretera del país, el Servicio Postal Mexicano (Correos de México) y la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) emitieron un timbre postal conmemorativo por los “100 Años del Día de la Caminera y el Caminero”.
La cancelación oficial de esta pieza filatélica se realizó en reconocimiento a la creación, el 17 de octubre de 1925, de la Comisión Nacional de Caminos, fecha que también dio origen a la conmemoración de quienes, día y noche, trabajan para mantener en condiciones óptimas las vías de comunicación que unen a México.
En representación del titular de la SICT, Jesús Esteva Medina, el subsecretario de Infraestructura, Juan Carlos Fuentes Orrala, destacó el papel heroico de las camineras y camineros, especialmente ante los recientes fenómenos meteorológicos que afectaron a cinco estados del país. “Su trabajo no conoce descanso. Bajo el sol, la lluvia o el frío, ustedes construyen el desarrollo y la unión de nuestro México”, expresó.
Acompañado por Violeta Abreu González, directora general de Correos de México, Fuentes Orrala subrayó que esta emisión especial es un homenaje a la entrega, profesionalismo y sacrificio de quienes han sido protagonistas del progreso nacional. “La historia de la Caminera y del Caminero es también la historia del esfuerzo colectivo por llevar bienestar a todos los rincones del país”, afirmó.
Por su parte, Abreu González resaltó que gracias a la labor de las camineras y camineros, el servicio postal ha podido llegar a cada comunidad del territorio nacional. “Cada timbre que viaje por México y el mundo mostrará el agradecimiento del pueblo a quienes hacen que el país siga avanzando”, señaló, al informar que se emitieron 200 mil estampillas conmemorativas.
Finalmente, Janette Cosmes Vásquez, directora general del Centro SICT Chiapas, reconoció que las camineras y camineros encarnan el espíritu más puro del servicio público, al continuar abriendo caminos —físicos y simbólicos— entre montañas, ríos, puentes y comunidades.