Nada nuevo de lo que se esperaba: detienen a los escoltas de Carlos Manzo

En un operativo conjunto, autoridades de Michoacán detuvieron a siete escoltas del alcalde de Uruapan, Carlos Alberto Manzo Rodríguez, asesinado el pasado 1 de noviembre. Los agentes formaban parte del equipo de seguridad que acompañaba al edil el día del ataque.

La detención fue realizada por elementos de la Fiscalía General del Estado, la Guardia Nacional y el Ejército Mexicano, quienes aseguraron a los escoltas en la Casa de la Cultura de Uruapan, donde Manzo mantenía oficinas de trabajo. La captura ocurre en el marco de las investigaciones que continúan abiertas para esclarecer el homicidio.

De acuerdo con las primeras líneas de investigación, los escoltas enfrentarán cargos por homicidio calificado en comisión por omisión, debido a que presuntamente fallaron en la protección del alcalde o incurrieron en irregularidades durante los hechos que derivaron en su muerte.

La captura de estos elementos se suma al avance previo de las autoridades, que ya habían detenido a uno de los presuntos autores intelectuales del crimen, considerado pieza clave dentro de una estructura vinculada a grupos criminales de la región. Con ello, la Fiscalía busca reconstruir la cadena de responsabilidades.

El asesinato de Carlos Manzo provocó una fuerte conmoción en Michoacán y elevó la presión sobre las corporaciones de seguridad. La detención de los escoltas representa un paso relevante en la investigación, aunque las autoridades han señalado que aún se esperan más diligencias para esclarecer completamente el caso.