– Juan de Dios Azíos Ramírez utilizaba un jarro para pedir limosna, y sus ganancias las repartía entre personas en su misma situación,
Un Día en la Historia de San Luis Potosí
Por Fernando Chavira López
San Luis Potosí, S. L. P.- El 8 de noviembre de 1859, fallece en la ciudad de San Luis Potosí, JUAN DE DIOS AZÍOS RAMÍREZ, pordiosero, clarividente, filósofo popular, conocido como JUAN DEL JARRO.
Juan de Dios Azíos Ramírez era un pordiosero cuya humildad le ganó el aprecio de miles de habitantes en la ciudad de San Luis Potosí.
Mejor conocido como Juan del Jarro (debido al pequeño jarro de terracota que siempre lo acompañaba) dedicaba las ganancias de sus limosnas a gente necesitada, incluyendo ancianos y otros en su misma situación.
Se dice que Juan del Jarro era un hombre excentrico, que odiaba el mes de julio y el baño. Además, nunca le faltaba un refrán y poseía una excelente memoria.
Con el tiempo y según cuenta la leyenda, a del Jarro se le empezaron a atribuir poderes de adivinación. Él podía escuchar el futuro de las personas en el jarro de terracota que cargaba a todos lados. Un hombre real, elevado a leyenda, proveniente de Matehuala.
Fue sepultado el siguiente día, después de misa de cuerpo presente en el templo del Carmen, y llevado en andas al panteón del pueblo del Montecillo, según el historiador Juan de Vildósola.
NOTA: Un hombre entre la historia y la leyenda. Cuando se clausura el cementerio de El Montecillo, personas piadosas recuperaron sus restos y descansan en el mausoleo de la familia Teisser en el panteón del Saucito.
-Estampa de un Juan de Jarro imaginario de autor desconocido.
-San Cristóbal del Montecillo imaginario en litografía de Ezequiel Martínez.