San Luis Potosí, S.L.P.- El Autódromo San Luis 400, ubicado en el parque Tangamanga II, fue sede este fin de semana del Racing Bike México, evento que reunió a más de 120 pilotos nacionales e internacionales en una competencia que combinó adrenalina, velocidad y técnica sobre dos ruedas.
Gracias a los espacios de primer nivel que ofrece la entidad, y al ambiente de estabilidad que genera el Gobierno del Estado, desde el viernes la afición potosina y visitantes de otras ciudades del país disfrutaron de exhibiciones llenas de emoción, en las que los pilotos demostraron sus habilidades y resistencia.
La llegada de equipos a San Luis Potosí desde el jueves tuvo efectos positivos en el turismo y la economía local. Entre los participantes, Miguel Cortés, originario de la Ciudad de México, calificó al autódromo como “un excelente espacio apto y técnico”. Otro competidor, Saúl Marín, también de la capital del país, elogió el parque por ser “agradable y limpio”, y aseguró que prolongará su estancia por un día más para seguir disfrutando de la ciudad.
La competencia incluyó diversas categorías y niveles de experiencia, permitiendo la participación tanto de novatos como de pilotos profesionales. Cada vuelta fue una demostración de destreza ante retos técnicos y estratégicos, en un ambiente que consolidó al Racing Bike México como un evento destacado en el calendario deportivo del estado.fue sede este fin de semana del Racing Bike México, evento que reunió a más de 120 pilotos nacionales e internacionales en una competencia que combinó adrenalina, velocidad y técnica sobre dos ruedas.
Gracias a los espacios de primer nivel que ofrece la entidad, y al ambiente de estabilidad que genera el Gobierno del Estado, desde el viernes la afición potosina y visitantes de otras ciudades del país disfrutaron de exhibiciones llenas de emoción, en las que los pilotos demostraron sus habilidades y resistencia.
La llegada de equipos a San Luis Potosí desde el jueves tuvo efectos positivos en el turismo y la economía local. Entre los participantes, Miguel Cortés, originario de la Ciudad de México, calificó al autódromo como “un excelente espacio apto y técnico”. Otro competidor, Saúl Marín, también de la capital del país, elogió el parque por ser “agradable y limpio”, y aseguró que prolongará su estancia por un día más para seguir disfrutando de la ciudad.
La competencia incluyó diversas categorías y niveles de experiencia, permitiendo la participación tanto de novatos como de pilotos profesionales. Cada vuelta fue una demostración de destreza ante retos técnicos y estratégicos, en un ambiente que consolidó al Racing Bike México como un evento destacado en el calendario deportivo del estado.
