• El evento se realizará el viernes 17 de octubre en la Facultad de Ingeniería; se promoverá el consumo responsable, la salud nutricional y la conciencia ambiental
San Luis Potosí, S.L.P.— En el marco del Día Mundial de la Alimentación, que se celebra cada 16 de octubre por iniciativa de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP) impulsa acciones para fomentar hábitos alimentarios saludables y sostenibles entre la comunidad universitaria.
La licenciada en Nutrición Rocío García García, del Centro de Salud Universitario, y la maestra en Salud Pública Judith Ortega Alvarado, coordinadora de UNIsalud de la División de Servicios Estudiantiles, destacaron los retos actuales en torno a la alimentación sostenible, como parte de una estrategia integral para mejorar la salud y el bienestar.
“Necesitamos estrategias agrícolas que hagan sostenible la producción y el acceso a los alimentos. México es uno de los países que más desperdicia comida”, señaló Rocío García.
Judith Ortega subrayó que dentro de la UASLP se trabaja para eliminar productos ultraprocesados de las cafeterías y ofrecer opciones que prevengan enfermedades crónicas. En ese sentido, anunció la realización de la Feria de la Alimentación, el próximo viernes 17 de octubre, de 8:00 a 11:00 horas, en la Facultad de Ingeniería.
Durante el evento se ofrecerán:
- Valoraciones de glucemia capilar y presión arterial
- Módulos informativos sobre higiene, el plato del buen comer y el buen beber
- Consejos prácticos para una dieta saludable en casa o en el trabajo
- Recolección de tapitas plásticas con fines solidarios
Las especialistas coincidieron en que una buena alimentación mejora el rendimiento académico y no necesariamente implica un mayor gasto.
“Comer saludable no significa gastar más, sino elegir mejor. Lo ideal es consumir alimentos locales y evitar el exceso de azúcar”, afirmó García.
La UASLP reafirma su compromiso con la formación integral de su comunidad, promoviendo el acceso a información confiable, servicios de salud preventiva y espacios de reflexión sobre el impacto social y ambiental de nuestras decisiones alimentarias.