La violencia sigue cobrando protagonismo en la región Huasteca. La tarde del martes, un operativo de alto impacto implementado por la Guardia Civil Estatal (GCE) y la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) evidenció la persistente presencia de grupos armados en Ciudad Valles, particularmente en las inmediaciones del ejido El Detalle.
El despliegue se activó tras una denuncia que alertó sobre hombres armados en la zona. La rápida respuesta de las fuerzas del orden derivó en un operativo de cerco que culminó con la detención de siete presuntos integrantes de grupos delictivos y el aseguramiento de un considerable arsenal, incluyendo armas largas, un arma corta, cargadores, cartuchos útiles y un vehículo.
Durante la primera fase de la intervención, fueron aprehendidos cinco sujetos, en posesión de cuatro fusiles de asalto y un arma corta. Posteriormente, en un segundo punto cercano, se capturó a otros dos individuos, quienes transportaban artefactos metálicos “ponchallantas”, comúnmente utilizados para evitar la persecución policial.
El operativo, considerado uno de los más contundentes en las últimas semanas en donde tuvo que intervenir el Ejercito, ha puesto nuevamente en la mesa la preocupante realidad: la violencia no da tregua en la Huasteca, una región que ha sido escenario frecuente de enfrentamientos, retenes ilegales y presencia de comandos armados.
Aunque este fue un certero al golpe al crimen organizado, el hecho de que estos grupos sigan operando con alto poder de fuego y movilidad genera inquietud entre la población.
Las personas detenidas, junto con el armamento, el vehículo y los artefactos asegurados, fueron puestos a disposición de las autoridades ministeriales para la apertura de las carpetas de investigación correspondientes. Las autoridades aseguraron que se garantizó en todo momento el respeto a los derechos humanos y el debido proceso legal.
Por su parte, la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana del Estado reafirmó su compromiso de trabajar en coordinación con fuerzas federales para restablecer la paz en el estado. También reiteró el llamado a la ciudadanía a utilizar los canales oficiales de denuncia como el 911 y el 089.
Sin embargo, más allá del discurso oficial, los hechos hablan por sí solos: la violencia sigue presente, y los grupos armados continúan desafiando al Estado en una región que clama por seguridad duradera, no solo reacciones temporales.
