– El doctor Clemente Rodríguez Cuevas hizo notar la necesidad de evitar los caudales que hoy se pierden a través los derrames de la Presa San José hacia el Río Santiago.
San Luis Potosí, S. L. P.- En virtud de la evidente incapacidad existente ya en la Presa San José para captar mayores volúmenes de agua, debido a su azolvamiento, el doctor Clemente Rodríguez Cuevas, integrante del Grupo Universitario del Agua (GUA) de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP), hizo una llamado respecto a la urgente necesidad de construir nuevos embalses en la región.
En ese sentido, el investigador de la Facultad de Ingeniería, indicó que tanto la presa El Palmarito como la de Las Escobas deberían haber sido construidas desde hace tiempo para evitar el actual desperdicio de agua y asegurar fuentes de suministro para una ciudad que no está preparada ni para la lluvia extrema ni para la sequía.
Rodríguez Cuevas señaló que la problemática del agua en San Luis Potosí es un asunto que ha sido históricamente complicado y lamentablemente, como en muchas otras ciudades, no se le ha dado la importancia necesaria, y a menudo se da prioridad a otros aspectos como el uso de suelo, dejando de lado la gestión hídrica.
Explicó que debido al azolve, la Presa de San José, que contaba con una capacidad inicial de 8 millones de metros cúbicos, actualmente sólo tienen capacidad de almacenar alrededor de 4.9 millones de metros cúbicos. Fue construida hace más de 100 años, y al paso del tiempo no ha sido complementada con nueva infraestructura que podría localizarse en las Sierras de San Miguelito y Sierra de Álvarez, y que podría captar el agua de lluvia que actualmente se desperdicia.
El investigador enfatizó que antes esa problemática, ya deberían haberse gestionado y construido al menos dos presas adicionales, El Palmarito y Las Escobas, para aprovechar ese recurso. Sin esa infraestructura, lo que podría ser almacenado se pierde, especialmente en el río Santiago, que alcanza su máxima capacidad, pero desperdicia el líquido.
La escasez de presas en esta región ha llevado a que, tras la abundancia de agua que no ha podido ser captado, varias fuentes superficiales como San José, El Peaje y El Potosino, en un punto crítico se sequen.
Ello ha obligado a la ciudad a depender casi exclusivamente de pozos profundos para abastecerse de agua potable, por lo cual, el doctor Rodríguez Cuevas alertó sobre el problema de extraer agua del subsuelo, que tardará mucho tiempo en regenerarse, ya que esta se ha venido acumulando desde hace más de 100 años.
El integrante del GUA, subrayó la importancia de que se cuente con infraestructura hidráulica adecuada para captar el agua de lluvia en el momento en que ésta se presenta, ya que no se sabe cuándo volverá a haber disponibilidad en tales cantidades. Así, la construcción de nuevas presas no sólo evitaría el desperdicio del recurso vital, sino que también garantizaría el suministro a largo plazo para San Luis Potosí, preparándola para enfrentar de mejor manera tanto la lluvias extremas como las sequías prolongadas.