Cadillac F1 enfrenta una intensa competencia para asegurar el fichaje de Sergio “Checo” Pérez de cara a su debut en la Fórmula 1 en 2026. Aunque el piloto mexicano es la principal prioridad del equipo estadounidense, su incorporación aún no está confirmada debido a que Pérez cuenta con varias ofertas de otros equipos dentro de la parrilla, lo que mantiene en suspenso su futuro.
El director de Cadillac, Graeme Lowdon, ha aclarado que aún no se han firmado contratos con ningún piloto y que el reciente evento en Miami no tenía como objetivo anunciar a sus pilotos, lo que prolonga la incertidumbre sobre quiénes serán los encargados de conducir los monoplazas en la próxima temporada 4 . Mientras tanto, Pérez se toma con calma su decisión, considerando todas las opciones disponibles y buscando un contrato de al menos tres años, consciente de su valor tanto deportivo como comercial en la Fórmula 1.
Además de Cadillac, al menos dos escuderías rivales están aceptadas en Pérez, lo que intensifica la lucha por su asiento. En esta contienda también ha surgido la figura de Valtteri Bottas, quien ha advertido que su continuidad en la Fórmula 1 durante 2025 le da ventaja para competir por un lugar en Cadillac, destacando su experiencia y vigencia en el paddock como factores clave 5 . Por si fuera poco, se especula incluso con la posibilidad de que otro piloto mexicano pueda unirse al equipo, lo que añade un nuevo elemento a las negociaciones.
El interés en Pérez no solo se basa en su talento y experiencia -con 281 Grandes Premios y seis victorias- sino también en su capacidad para aportar al desarrollo técnico del equipo bajo la nueva reglamentación que entrará en vigor en 2026. Su respaldo económico y popularidad en México también representan un valor estratégico para Cadillac y General Motors, especialmente con la reciente ampliación del contrato del Gran Premio de México.
Aunque el futuro de Checo Pérez en la Fórmula 1 sigue siendo incierto, su nombre continúa siendo uno de los más sonados en el mercado de pilotos. Cadillac, como nuevo equipo, busca consolidar su plantilla con figuras de alto perfil, pero deberá competir con otros equipos que también valoran la experiencia y el talento del piloto tapatío para sus proyectos futuros.
En resumen, la batalla por el asiento de Checo Pérez en Cadillac F1 está lejos de resolverse, con múltiples factores en el juego y rivales que no ceden terreno. La decisión final podría definirse en los próximos meses, cuando se aclaren los movimientos en el mercado de pilotos y se concrete el proyecto deportivo de la escudería estadounidense para su estreno en la máxima categoría del automovilismo mundial.