En sesión celebrada este martes, el órgano jurisdiccional determinó que el proceso debe reiniciarse desde la etapa de convocatoria debido a irregularidades graves, incluyendo la eliminación arbitraria de once consejeros. El fallo ordena devolverles sus derechos y garantizarles la participación plena, haciendo válida una resolución previa que había señalado deficiencias en el procedimiento del partido.
La elección deberá reponerse en su totalidad: el tribunal local instruyó al Comité Directivo Estatal del PRI en SLP y al órgano auxiliar de la Comisión Nacional de Procesos Internos a llevar a cabo una nueva convocatoria, con pleno respeto a los derechos de los 11 consejeros afectados. La medida busca asegurar condiciones de equidad y legalidad en el relevo de la presidencia, además de atender lo resuelto por la Sala Monterrey. Hasta tanto se realice el nuevo proceso electoral, Sara Rocha Medina queda destituida de manera temporal, y se considera nulo cualquier acto derivado de esa elección anulada.