La congregación católica fundada por Marcial Maciel emitió un comunicado en el que expresa reconocimiento y dolor hacia quienes denunciaron al sacerdote, admitiendo que gracias a esas voces se ha impulsado un proceso de transformación y renovación interna. Aseguró que desde hace más de 15 años ha implementado mecanismos de escucha y reparación, incluyendo protocolos de prevención para evitar nuevos abusos de poder y sexuales..
Aunque la Legión aceptó participar en el documental como un acto de responsabilidad y transparencia, lamentó que se hayan utilizado imágenes de personas —incluidos menores, exconsagrados y sacerdotes— sin haber obtenido autorización, lo cual ha generado malestar entre los involucrados.
La congregación recordó que ya en 2010 reconoció públicamente los abusos cometidos por Maciel tras un proceso que inició en 2006, cuando el entonces papa Benedicto XVI ordenó que Marcial Maciel se retirara de sus funciones sacerdotales a una vida de oración y penitencia..
Este pronunciamiento ocurre en el contexto del reciente lanzamiento de la docuserie Marcial Maciel: El lobo de Dios (HBO Max), que vuelve a poner en la atención pública el legado oscuro del fundador de los Legionarios, revisitando acusaciones, encubrimientos y el impacto profundo de sus crímenes en múltiples víctimas.