abril 02, 2025

Los desechos humanos. La Soga al Cuello, Por Gandhi

¿Tan mal gusto tengo yo, que permito competencias de una villana, vos noble? ¿De una simple, vos discreta?. Tirso de Molina.

El patrón dió la orden, la reelección de la titular de la comisión estatal de derechos humanos Giovanna Argüelles Moreno era una prioridad, los diputados de Morena tal vez no advirtieron las señales y se preparaban para presentar una propuesta alternativa. Enrique Rivera, exiliado en Canadá algún tiempo, según porque lo perseguía la legión del mal cuando se oponía a la puesta en marcha del proyecto minero en el Municipio de Cerro de San Pedro. A diferencia de otros activistas que se quedaron a la confrontación con la poderosa Minera San Xavier, el personaje hubo de salir por piernas cuando la lumbre ya llegaba a los aparejos. Al final, la minera se quedó, sacó el mineral y dejaron un inmenso agujero para recordar nuestra torpeza y abulia. El personaje regresó a explotar su propia beta, el papel de activista, estoico, sacrificado redentor de causas sociales dispuesto a servir al pueblo desde cualquiera trinchera. En la arena pública Morena tiene una deficiencia que cubrir, el posicionamiento sobre los temas relevantes, casi no tiene opinadores, ya deje usted si son elocuentes o congruentes, ya con que logren hablar con un mínimo de soltura. Salvo el diputado Carlos Arreola Mallol que opina hasta de la opinión de los que ni opinan, casi no se les conoce la voz a los representantes populares del chaleco guinda. Un cursito de oratoria y debate político de vez en cuando no les vendría mal.

Giovanna Itzel Argüelles Moreno fue reelecta como titular de la comisión de los derechos humanos con 20 de 27 votos de diputados del congreso del estado, se requería un mínimo de 18 para ajustar las famosas dos terceras partes que exige la ley, un mazacote de verdes, petistas, priistas, panistas y hasta el diputado de movimiento ciudadano que se ha dicho en múltiples ocasiones agraviado por políticos ligados a la gallardía. Una cosa es no tener memoria y otra muy distinta no tener dignidad Marco Antonio Gama Basarte. En la vida no todo son chambas, bisnes, favores, también se trata de alguna vez hacerte un poquito el difícil, luego porque los tratan como meretrices. Faltó el voto del profe Bárcenas que convalece de algún malestar y los seis diputados de Morena que optaron por la opción distinta a la línea proveniente del palacio grande. Enrique Rivera Sierra ya puede presumir que alguna vez obtuvo seis votos de diputados. Sus reacciones son curiosamente predecibles, el personaje ya sabía que perdería, pero el manejo político es de quien anuncia una renovada actitud. Habla de la injerencia del poder ejecutivo a quién le atribuye una maliciosa y pervertida conducta. La ocasión amerita que la bancada morenista se desmarque de la esclavitud del gallardismo. ¿Por qué no fue un diputado de Morena quien hizo el anuncio de ese despertar? ¿Se fue por la libre Enrique Rivera y sin consultar a sus patrocinadores les endilgó su percepción muy particular?

Lo que dice Enrique Rivera en su entrevista banquetera es que los ciudadanos tienen la opción de recuperar el control de las decisiones que se toman desde el poder ejecutivo. Ahora bien, cuando habla de sumisión y se asume como el portavoz de Morena también se expone a ser el censor de las experiencias recientes, como esa donde los legisladores de Morena aprobaron con el partido verde puntos de acuerdo obscenos como la venta de los palcos de la arena Potosí y la ley de ingresos del gobierno del estado. ¿Asumieron que el costo político sería solo para quien se beneficiaría? Están a punto de descubrir que a la gente no se le olvida el rostro del político que aprueba un aumento al precio de la cerveza, malditos, no merecen ser llamados mexicanos. Ya que está juzgando con varita de nardo el nobel político, bien haría en medir con cuartas las acciones de sus promotores. Por su parte Rita Ozalia Rodríguez, presidenta de Morena, haría bien en revisar que no haya comprado una cacatúa mientras buscaba un jilguero. La peor maldición que le podría suceder es tener su propio Leonel Serrato, esas mascotas siempre dan problemas. Son mañosos, marrulleros, faramallosos, camanduleros e ingratos. Morena siendo Morena, -forever.

A los múltiples señalamientos con respecto del procedimiento simulado, se suma la carta de Ignacio Acosta Díaz de León, al personaje le precede currículum y sobradas credenciales pero desafortunadamente no cuenta con el favor político de quienes dan el visto bueno. En su extensa misiva le recrimina a los diputados que participaron en las entrevistas ni siquiera preguntar lo referente a la exposición de los aspirantes, quizás lo que menos querían era alargar la agonía de esa funesta puesta en escena. Peca de ingenuo el prominente frustrado, los diputados difícilmente son capaces de elaborar una pregunta. Díaz de León expone con precisión una serie de irregularidades posiblemente atribuibles a la incompetencia de funcionarios del congreso del estado y que obstaculizaron a los aspirantes en su desempeño, quedará para el anecdotario, otra pifia más de la infinita estupidez e indolencia del poder legislativo. Por extraño que parezca siempre hay personas que participan cándidamente en este tipo de concursos a pesar de que es de sobra conocido que los premios se arreglan tras bambalinas, allá entre coordinadores se reparten los espacios disponibles. ¿Qué jodida independencia puede tener una ombudsperson que inicia su segundo periodo completamente comprometida con el poder político? ¿Puede un ciudadano común y corriente confiar que en caso de ser violentados sus derechos por alguna autoridad tendrá un respaldo honesto, comprometido e independiente de la CEDH?

No seamos ilusos, la comisión ni siquiera se ha pronunciado sobre el tema del traslado ilegal de mujeres en prisión a un penal en la zona huasteca y que provoca el aislamiento de sus familiares. Si algo de humanidad le queda a un delincuente se sostiene gracias al vínculo con la familia. La comisión estatal de derechos humanos es palera y porrista, su condición de persona con discapacidad no le impide a Giovanna Argüelles colocarse de tapete para que pase la autoridad pisoteando los derechos de los potosinos. De por sí, siempre se ha sabido la ausencia de facultades sancionadoras de la CEDH, si acaso permiten reclutarlos como testigos para cuando se re victimiza a los inconformes que acuden a solicitar algún servicio, o sea, una recomendación de la comisión estatal de derechos humanos y un quejido perdido en la oscuridad de la noche, es lo mismo. ¿Por qué gastamos los potosinos 30 millones de pesos en esa entelequia? 

Ah, olvídenlo, ya recordé porque…

@gandhiantipatro