Silvia Pinal, actriz considerada como la última diva de la Época de Oro del Cine mexicano, murió hoy cerca de las 18;00 horas, Pinal se encontraba internada desde el pasado 21 de noviembre en un hospital de la Ciudad de México, por una infección urinaria; sin embargo, no se ha revelado la causa del deceso.
La noticia de la muerte de Silvia Pinal se ha difundido rápidamente y ha dejado a sus colegas consternados por la pérdida de una figura tan influyente en la industria del cine, teatro y televisión.
La actriz de Viridiana,
“Yo escogí a Buñel, no él a mí”. De eso presumía hace años la actriz mexicana Silvia Pinal.
“Me enamoré de su cine, de su humor negro, de su manera de ser y supe que no descansaría hasta ser dirigida por él y lo logré”, dijo en una entrevista concedida al diario La Jornada.
Se trató de una declaración sorprendente que se recuerda ahora que se informa sobre su muerte.
Pinal contaba la historia de cómo se filmó “Viridiana”, en 1961, una de las obras maestras del cineasta español y la primera cinta mexicana que ganó la Palma de Oro en el Festival de Cannes.
En su autobiografía “Ésta soy yo. Silvia Pinal”, la actriz recordaba que la filmación fue una especie de regalo de bodas de su entonces marido, el empresario Gustavo Alatriste.
La pareja viajó a España para contactar a Buñuel, a quien encontraron en su pueblo natal Calanda, en la provincia de Teruel. Pinal los presentó.
“¿Y él quién es, productor, director?”, preguntó. La actriz respondió: “No, don Luis, es mi marido y es mueblero”.
Intrigado, Buñuel insistió: ¿por qué un vendedor de muebles quería hacer cine?
“Porque me ama”, fue la respuesta. “Ah”, dijo el director. “Es una muy buena razón”.
Alatriste pagó 150.000 pesos de entonces al cineasta por la película. Ése fue el regalo de bodas para su esposa.
Y “Viridiana” es la cinta por la que más se la recordará y la que la consagró como actriz.
A Silvia Pinal se le consideraba “la última gran diva de México” y entre las razones para la definición destacan las películas “Viridiana”, “El ángel exterminador” y “Simón del Desierto”.
Fue una de las actrices que más filmó con el cineasta español.
En México la llamaban “la musa de Buñuel”.
Mujer seductora
Pinal nació en en 1931 en el puerto de Guaymas, Sonora, en el noroeste del país.
Por el trabajo de su padre, un exmilitar, vivió en varios lugares antes de asentarse definitivamente en Ciudad de México, donde a los 14 años consiguió su primer empleo como secretaria en un laboratorio farmacéutico.
En 1948, debutó en su primera película con un papel pequeño en “Bamba”, y a partir de ese momento filmó más de 100 cintas en México y otros países.
Silvia Pinal fue una actriz versátil: lo mismo interpretó a una ingenua chica consentida de familia adinerada, que a mujeres seductoras en busca de conquistar hombres millonarios.
En su filmografía abundan las comedias ligeras o de estilo comercial, con las que obtuvo varios reconocimientos y la volvieron muy popular en México.
De acuerdo con especialistas tuvo un papel central en el estilo de cine que nació en la década de los 50 y cuyo tema más frecuente fueron historias desarrolladas en las ciudades, a diferencia de otros períodos cuando los guiones se basaban sobre todo en la vida del campo.
Fue un contexto distinto que requería, también, de otro tipo de actrices.
“Más que campo, arrabal o barrio debían sugerir una sensualidad más sofisticada, desbordante”, escribió el historiador Felipe Mera en la revista Veredas de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).
Era una imagen que causaba controversia.
En 1961, por ejemplo, el gobierno de España encabezado por Francisco Franco prohibió la exhibición de “Viridiana” después de que el diario italiano L’Osservatore Romano la calificó como “blasfema”.
Pinal contaba que las autoridades españolas ordenaron confiscar todas las copias de la cinta, pero amigos de la actriz enterraron en su jardín un par y ella misma llevó a México de contrabando otras tres.
Por eso fue posible que “Viridiana” se exhibiera en América Latina.