El andar de su carreta de madera desde la calle de Francisco Villa, calle cercana al legendario jardín de niños de La Venadita, al norte de la ciudad, hasta la calle de 16 de Septiembre y Ciclón en el mero barrio de Tlaxcala es famoso y muy solicitado de lunes a viernes por sus inigualables tostadas y duros preparados.
Pancho o “El Chino” como lo conocen sus fieles clientes, que lo comienzan a ubicar desde que sale de su casa y lo detienen para que haga constantes paradas y que les despache su manjares preparados con ahínco y mucho sabor.
Pancho, diariamente inicia su día de lunes a viernes muy temprano para ir al Mercado República a surtir lo necesario para preparar la mezcla de pico de gallo con cueritos, aguacate y ceviche de pescado.
Cabe mencionar que el gran éxito de lo que vende, aparte de su gran sabor, es que las tostadas y duros los fríe diariamente a fuego lento con carbón.
“Diario pongo a freír entre 10 y 12 kilos de tortilla para las tostadas y unos 100 duros de harina, por eso salgo tarde, antes era mas temprano, pero mi señora se enfermo y solo me ayuda a picar la verdura”.
Pancho es un personaje que desde hace más de 35 años recorre esta ruta para vender sus famosas tostadas y duros, “mi papá que también se llamaba Pancho recorría las calles con su carreta llena de dulces y también duros y tostadas, yo trabajaba en una fábrica Aceros Tangamanga, me despidieron y pues me puse a vender y ya son más de 35 años”.
“Anteriormente iniciaba antes de las 12 frente a La Venadita y luego me venía por Damián Carmona y de ahí hacia varias paradas hasta mi lugar en 16 de Septiembre y Ciclón donde llegan mis clientes, aquí pretendo estar antes de las 4 tarde, pero a veces me detengo un rato en el Jardín de Santiago o en alguna calle de esta ruta y llegó pasada esa hora”.
Las tostadas gratamente fritas diario llevan una generosa embarrada de crema y de ahí reciben la mezcla de cueritos con pico de gallo, o de aguacate esas son a 12 pesos y las de ceviche a 30, todas con su tostada de cubierta para que no le falte para terminar el manjar.
Los duros van desde los 25 a 40 pesos pesos, pero júrelo que valdrá la pena esos bien gastados pesos, y como mínimo repetirá por dos tostadas, eso si lleve su respectivo refresco o agua fresca porque “El Chino” hasta las próximas semanas llevará su hielera con bebidas.
El buen Pancho es un hombre serio, servicial y atento, rápido en lo que prepara y reconoce a sus clientes a la primera y los nuevos se les atiende muy bien.
“Pretendo acabar lo que traigo diariamente y a pesar de que la pandemia nos afectó a todos se hace lo que puede para echarle ganas a la venta”.
Dejamos a Pancho para que atienda y despache en su esquina en la calle 16 de Septiembre lugar a donde se concentran y llegan desde albañiles, empleados, jubilados, cargadores del mercado, hasta uno que otro conductor de Suburban o carro del año que baja y le dice “una de las siempre mi Chino con la respectiva tostada de cubierta”.