– Enfundado en la camiseta del Atlético de San Luis, concluyó con éxito su actual gira.
Por Gerardo Guillermo Almendárez Mireles
– San Luis en Primavera estuvo de gala con el artista uruguayo, quien rellenó todos los huecos de la Plaza de Fundadores con su talento, de la talla de un premio Óscar a mejor canción.
San Luis Potosí, S. L. P.- El corazón de San Luis Potosí se vistió de gala con el cantautor uruguayo, Jorge Drexler, cuyas melodías hicieron cantar, bailar y gritar de alegría al extenso público que se dio cita en Plaza de los Fundadores en lo que fue una memorable tercera noche del IV Festival Internacional San Luis en Primavera.
Con su singular voz, guitarra y mezclas electrónicas con las que recreo la milonga, la canción ranchera a la uruguaya, – como la entiende hoy un descendiente de sobrevivientes del holocausto –, Drexler, conquistó al público potosino y visitantes de esta Capital para disfrutar de nuestra ciudad en ésta Semana Santa.

En este evento estelar, el ganador del Óscar a Mejor Canción por el primer tema en español en alcanzar ese galardón, disfrutó, a todas luces interpretar a capela su creación “Al otro lado del río”, la que al igual que su pieza “Movimiento”, arrancaron la ovación de quienes aman esa acompasada mezcla de música pop, urbana y trova, salpicada también con chispazos de otras culturas y ritmos.
De igual manera, sus movimientos rítmicos y su amplia sonrisa, así como su evidente disfrutar del escenario, arropado por su guitarra, un sintetizador, y una caja de ritmos, completaron el espectáculo de este gran artista, ejemplo de orgullo latinoamericano, quien como lo dice en una de sus canciones, prácticamente sólo requiere de dos cosas en la vida: De la voz y su guitarra.

Jorge Drexler agradeció a la asistencia por apoyar su música, por seguir sus presentaciones, pero sobre todo por la entrega de San Luis Potosí, qué prácticamente le dió su corazón, en esta noche del lunes, que además le regaló al cantautor una luna gran luna “blanca como la plata”, asintió, para coronar así el final de su actual gira por el mundo, cadena de sucesos que lo hizo abandonarse de hinojos, en la zona del proscenio, al feliz momento.
No obstante que el final estaba cantado, el público pedía continuar la fiesta, por lo que, ad libitum, Drexler no solo respondió con un bis, y continuó hasta un segundo y un tercero, lo que además se prolongó debajo del escenario, – ya para un reducido grupo de fanáticos que buscaron un acercamiento más con su ídolo -, en una noche inolvidable para quienes asistieron a la Plaza de los Fundadores a entregarle su corazón a un Jorge Drexler, quien extasiado se despidió trotando por el escenario, luciendo su nombre, plasmado en el dorso de su playera auriazul del Atlético de San Luis.
