Ciudad de México.– El Servicio de Administración Tributaria (SAT) anunció una actualización en las reglas fiscales relacionadas con los depósitos bancarios, con el objetivo de reforzar el control fiscal, fomentar la transparencia y prevenir irregularidades en el flujo de dinero dentro del sistema financiero mexicano. La medida busca garantizar que los movimientos de recursos se realicen dentro del marco legal y que los contribuyentes cumplan con sus obligaciones de manera equitativa.
De acuerdo con las modificaciones publicadas recientemente en el Diario Oficial de la Federación (DOF), el nuevo límite anual para depósitos bancarios que no requieren el pago de impuestos adicionales será de 2 millones 28 mil 610 pesos. A partir de esa cantidad, el SAT podrá considerar los recursos como ingresos gravables si el contribuyente no demuestra su origen legítimo o no los registra en su contabilidad. Según el Artículo 59 del Código Fiscal de la Federación, cualquier depósito que no pueda comprobarse puede presumirse como ingreso sujeto a impuestos.
El SAT precisó que las personas que no estén inscritas en el Registro Federal de Contribuyentes (RFC) o que no lleven contabilidad formal deberán acreditar la procedencia de los depósitos que superen el límite establecido. En caso contrario, estos montos podrían considerarse ingresos gravables, salvo que se compruebe que provienen de fuentes legales como herencias, préstamos o donaciones. La autoridad fiscal enfatizó que el propósito de esta actualización no es aumentar la carga tributaria, sino fortalecer los mecanismos de fiscalización y confianza en el sistema financiero.
Finalmente, el organismo recaudador recomendó a los contribuyentes mantener actualizados sus datos en el RFC, presentar sus declaraciones en tiempo y forma, registrar correctamente sus movimientos bancarios y revisar su Buzón Tributario de manera periódica. El SAT destacó que estas acciones forman parte de un esfuerzo integral para “restablecer condiciones de competencia equitativa” en el cumplimiento fiscal y evitar prácticas de evasión o uso indebido de cuentas bancarias.
