La escudería Red Bull Racing anunció este martes la destitución de Christian Horner como director del equipo de Fórmula 1, poniendo fin a una gestión de dos décadas que dejó una huella significativa en el automovilismo mundial.
Horner asumió el cargo en 2005, convirtiéndose en el director más joven en ese momento, y bajo su liderazgo Red Bull conquistó un total de 14 campeonatos mundiales: ocho títulos de pilotos —cuatro con Sebastian Vettel y cuatro con Max Verstappen— y seis de constructores. Además, el equipo acumuló más de 120 victorias y se consolidó como una de las fuerzas dominantes en la Fórmula 1.
La salida del directivo británico ocurre en un contexto de tensiones internas, bajo rendimiento en la temporada actual y recientes cambios estructurales dentro de la organización. A pesar de haber sido ratificado en su cargo a inicios de este año, luego de una investigación interna sobre presunta conducta inapropiada, la presión por parte de la sede central de Red Bull en Austria y los desacuerdos con el entorno de Verstappen habrían sido determinantes.
Laurent Mekies, actual director del equipo satélite Racing Bulls, fue designado como nuevo jefe de equipo y asumirá sus funciones a partir del Gran Premio de Bélgica. En tanto, Alan Permane ocupará la dirección de Racing Bulls.
En un comunicado oficial, Red Bull agradeció a Horner por su liderazgo, visión y contribución al éxito deportivo alcanzado durante su gestión. El movimiento marca una nueva etapa para la escudería, que buscará retomar la competitividad en una temporada marcada por la irregularidad y la salida de figuras clave como el diseñador Adrian Newey.