abril 27, 2024

abril 27, 2024

De polvos y olvidos, entre uno y otro cafecito. 18 de mayo de 2022

Un Texto de Valentín Ortiz Rebolloso.

Ébano, S. L. P.- A mí no me importa si los que se decían mis amigos me han olvidado. Seguro lo estoy que, para los amores pasados y enemigos, en sus sueños viviré.

Lo que si me duele es ser testigo del vuelo de los hijos e hijas con rumbo a otros puertos, por el aliento de su dignidad, por no estirar la mano a los que desean que sean miembros de su comparsa.

Es de humildad reconocer que en este pueblo no se vive de nostalgias, ni siendo eternos come aire. Vamos alentándolos a agitar sus alas para que mañana reconstruyan esta sociedad que nos enferma; que nos castra los sueños.

– ¡No me hagas llorar mi Chona!, de por sí, las porciones de frijolitos y tortillitas, cada día se reducen al colocarlas sobre el plato.

– Le propongo que hagamos hasta lo imposible a nuestros hijos por convencerlos que el acto de leer un buen libro activa la mente, que les da ideas para que siembren una plantita comestible, para que embarnezcan su físico, para que apliquen las cuatro RRRR en su vida propia para edificar un mejor futuro.

Que vivan un día sin el aparatito que les roba su gran tiempo.

– Qué buenas ideas me está dando para comentárselas a mis hijos e hija, y sobre todo a mi yerno, que no quiere salir del cuarto; que tiene aire acondicionado, ¡que porque el calor lo sofoca!

– No se mortifique Doña Chiquis, ¡aplíquele la del perro cuando no le hace caso!…