Ante las altas temperaturas y la falta de agua, enviar a los alumnos a sus casas y recibir clases de manera virtual no es la opción ideal, ya que contribuye al rezago educativo. Sin embargo, en la situación actual, no hay muchas alternativas disponibles.

La presidencia de la Comisión de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología del Congreso del Estado reconoce que implementar clases virtuales no es lo óptimo, pero es una medida necesaria para evitar exponer a los estudiantes a riesgos como golpes de calor.

Cada comunidad escolar debe evaluar su situación y buscar alternativas que garanticen la seguridad de los alumnos. La prioridad es proteger su salud y bienestar, incluso si eso significa recurrir a métodos de enseñanza no convencionales.

Es importante destacar que esta situación puede afectar el aprendizaje de los niños, especialmente en materias como español y matemáticas. Sin embargo, la seguridad de los estudiantes debe ser la principal preocupación.

En cuanto a las actividades al aire libre, se recomienda seguir las indicaciones de la Secretaría de Educación y suspenderlas en horarios de mayor calor para evitar riesgos para la salud de los alumnos.